La leyenda arranca en el caluroso
verano de 1972, en un pueblecito de Missouri llamado Louisiana, cuando tres
niños de una misma familia, de 15, 8 y 5 años, aseguran haber visto mientras
jugaban en el bosque a un extraño ser peludo, de algo más de dos metros de
altura, aproximarse a ellos de forma misteriosa, portando –aseguraron– una
especie de animalillo entre los brazos.
![]() |
Aspecto posible del monstruo de Missouri según la web FORTEANA |
El encuentro fue seguido por
otros muchos en la localidad a lo largo de los días siguientes, acompañados
siempre por algunas de las características que habían denunciado los niños –un
fuerte mal olor, aspecto del monstruo muy parecido al de una persona, quizá un
simio– junto a otros fenómenos como extrañas huellas, agujeros, muerte de
animales domésticos y un extraño aullido que parecía provenir de lo más
profundo del bosque, siempre en plena noche.
Pese a las batidas, y las
numerosas operaciones de búsqueda que se pusieron en marcha aquellos días por
parte de familiares, vecinos e incluso investigadores, el monstruo no volvió a
ser visto, sólo a través de los indicios que sus perseguidores iban encontrando
a su paso –de nuevo el mal olor,