Samuel García Barrajón es
escritor pero, sobre todo, investigador de enigmas. Especializado en todo lo
que tiene que ver con Nibiru, los Anunnaki, y otras leyendas contemporáneas que
relacionan civilizaciones antiguas con extraterrestres, queremos hablar con él
para que nos explique algo más sobre estos asuntos, que nos parecen tan
interesantes.
Posible ubicación de Nibiru respecto al Sistema Solar. |
En primer lugar, Samuel, muchas gracias por prestarte a la entrevista. Nos gustaría empezar directamente por el planeta
Nibiru, que da título a uno de tus libros. Dinos: ¿Es un planeta real? ¿Dónde
se encuentra? ¿Qué pruebas darían a quienes descreen para convencerles? ¿Hay
pruebas científicas o son sólo suposiciones?
Muchas gracias por el detalle, siempre es un gusto poder
explicar lo que uno investiga.
Los anunnaki es un
término sumerio que se refiere a sus dioses en general, dioses que podemos
encontrar en todo tipo de escritos porque representan la divinidad y esta
impregna prácticamente todo en el mundo antiguo. Hay ciertos anunnakis que son
la personificación de los astros o están relacionados con estos; por ejemplo
Shamash es el dios Sol. Existen otros ligados a fuerzas de la naturaleza u
otros tipos de abstracciones. Sin embargo, hay un grupo de anunnakis
denominados...
Apkallus, que incluso los primeros historiadores les consideraban seres reales de carne y hueso. Tenemos constancia de ello por los escritos de Beroso, que escribió la historia de Babilonia en la época de Alejandro Magno. De algunos textos que los citan se deduce que surgieron de una especie de “ovnis”, o huevos luminosos y estrellas llameantes como decían los antiguos, que “caían” desde el cielo. Por lo tanto, resulta evidente que estamos delante de un encuentro cercano del tercer tipo de los que estudia la moderna ufología, también denominados “encuentros con humanoides”, sólo que sucedió hace 5000 años, justo cuando Nibiru era visible en los cielos.
Apkallus, que incluso los primeros historiadores les consideraban seres reales de carne y hueso. Tenemos constancia de ello por los escritos de Beroso, que escribió la historia de Babilonia en la época de Alejandro Magno. De algunos textos que los citan se deduce que surgieron de una especie de “ovnis”, o huevos luminosos y estrellas llameantes como decían los antiguos, que “caían” desde el cielo. Por lo tanto, resulta evidente que estamos delante de un encuentro cercano del tercer tipo de los que estudia la moderna ufología, también denominados “encuentros con humanoides”, sólo que sucedió hace 5000 años, justo cuando Nibiru era visible en los cielos.
La vinculación de estas criaturas con Nibiru es más que
palpable, algunos relatos del pueblo
dogón aseguran que venían de allí… A
lo mejor simplemente así lo hicieron creer a los “contactados” de la época
¿quién sabe? No obstante, determinar que eran extraterrestres sigue siendo
complicado, en la misma medida que asegurar que el fenómeno ovni lo es. Lo que
sí está claro es que aquello no era cosa de hombres, pues, aquellos “antiguos
astronautas “se mostraron como seres mitad pez mitad humanos.
Por otra parte Nibiru es un astro real, eso es
incontestable. Escritos mesopotámicos como el Enuma Elish, Mul Apin o
Astrolabio B así lo documentan. Que se corresponda con un planeta es la
conclusión más lógica y factible a la que uno llega después de profundizar en
los vestigios astronómicos sumerios y otros tantos de diversas antiguas
culturas y civilizaciones. Yo creo que es un planeta, que forma parte de
nuestro Sistema Solar, y aporto mucha información al respecto en mis libros y
publicaciones.
Podría corresponderse con alguno de los planetas que se
creen que están más allá de Plutón como se señala en este estudio publicado a
principios de este mismo año (http://www.agenciasinc.es/Noticias/Objetos-transneptunianos-sugieren-que-hay-mas-planetas-en-el-sistema-solar).
Quizá se trate simplemente de un cometa ¿por qué no?
Sea lo que sea Nibiru, es muy profunda su huella en los
pueblos del pasado y por lo tanto merece ocupar un lugar en la historia que
hasta ahora se le ha negado. Sólo por eso ya vale la pena buscarlo. Indicios
hay muchísimos, en cambio la prueba definitiva únicamente puede llegar cuando
se localice, cosa que no sucederá nunca si lo ignoramos y pasamos de largo.
¿Están los Anunnaki
en todas las culturas antiguas, o sólo pueden encontrarse a través de
determinados pueblos?
La figura de los dioses instructores de la antigüedad es
casi universal. Si a estos le sumas una relación directa con una serie de
estrellas muy concretas, que van desde las Pléyades, pasando por Tauro, Orión,
Sirio, Cáncer y hasta la Osa Mayor, y que además están presididas por un astro
sagrado no identificado como Nibiru, seguramente estamos hablando del mismo
tipo de seres o entidades.
No sé si están en todas las culturas pero cuando te
encuentras con estos factores tienes más de un motivo para sospechar que así
sea… Cuando me refiero a apkallus, nommos o Shemshu Hor, doy por hecho que se
tratan de los mismos personajes.
¿Qué opinas de las
inexactitudes en las traducciones de Zecharia Sitchin, creador, digamos, de
todas estas hipótesis, que han denunciado algunos investigadores?
A Sitchin sólo le nombro una vez en mis libros y es para
decir que mi trabajo no tiene nada que ver con el suyo. Con todo, es verdad que
fue el primero en considerar a Nibiru un planeta y popularizar a los anunnakis.
No tengo nada contra él; si no fuera por sus libros no hubiese despertado en mí
el interés por Nibiru. Pero sí pienso que sus obras están descontextualizadas
en gran parte y, por lo tanto, no son el mejor punto de partida si pretendes
dar caza al auténtico Nibiru o a los verdaderos anunnakis.
¿Tiene algo que ver
el mito del Diluvio Universal –un mito que aparece en diversas culturas de todo
el planeta– con los Anunnaki?
Al parecer, en muchos de estos mitos que se han tejido
sobre un gran diluvio cobra especial protagonismo algún astro sagrado como
Nibiru o dioses instructores como los anunnakis. En este punto hay que intentar
separar el grano de la paja. Todo mito contiene alguna verdad, pero esa verdad
nunca será “tal cual” la cuente el mito.
Es más que probable que estos relatos apunten a un mismo
episodio de grandes lluvias que se produjo en el pasado. Pero de ahí a que
borrara la faz de la Tierra o la cubriera en su totalidad de agua como se
desprende de varios de estos pasajes… hay mucho trecho.
Las “aguas de la creación” son un elemento en común y
sagrado en la mayoría de las tradiciones ancestrales. Nibiru es un astro
sagrado. Los anunnakis eran sagrados. Quizá por este hilo de la sacralidad
confluyan todos estos elementos en unos mitos que, como he dicho antes, seguro
representan grandes lluvias fuera de lo común o a lo que estas sociedades
estaban acostumbradas.
Sin embargo nunca se sabe… Hay algo muy curioso a tener en
cuenta y en que las tres partes implicadas coinciden. Tanto el diluvio, como
Nibiru o los dioses instructores de antaño, apuntan a los alrededores del 3000
a.C., en el mismo momento que arrancaban las primeras civilizaciones.
¿Y con Egipto? ¿Eran
los egipcios herederos de esta “cultura” o “civilización” o no tienen nada que
ver?
Los Shemshu Hor egipcios son los equivalentes a los
Apkallus anunnakis sumerios. Y el astro sagrado de la civilización egipcia es
un tal Horus de la Duat que presenta los mismos rasgos y características que su
homólogo Nibiru.
La Gran Esfinge y algunas pirámides llevan su nombre, el de
Horus, como también los faraones e incluso está representado en tumbas y
templos tan importantes como el de Dendera.
Blanco y en botella...
Ahora, ya, por último: Háblanos de tus libros y tus próximos proyectos.
Recién he publicado un ebook con
el título El planeta Nibiru existe que se suma a mi anterior libro “Nibiru.
Si no existe habrá que inventarlo”. Ambos son de investigación y
complementarios.
Uno de los libros recientemente publicados por Samuel. |
El primero que publiqué se
centraba más en el simbolismo y la astronomía antigua para desentrañar algunos
de los enigmas que presentan las grandes civilizaciones del pasado, sobre todo
aquellos que tienen relación con Nibiru. La Atlántida, el Diluvio Universal, la
Gran Pirámide, el Zodíaco de Dendera o el juego de la Oca están entre ellos. El
planeta Nibiru existe se centra más en la ubicación de este astro en la
actualidad y los estudios astronómicos actuales que avalan su existencia. Los
dos se pueden adquirir en amazon.
Ya son 10 los años que llevo tras
la pista de Nibiru y otros misterios y, espero seguir haciéndolo por mucho
tiempo. Estoy siempre preparando nuevos proyectos y artículos. El próximo será
sobre la Gran Pirámide y pretende desvelar uno de los más fascinantes enigmas
que presenta tan singular construcción: el porqué se construyó de esa manera.
Ahí lo dejo.
Los interesados en estos enigmas se
pueden descargar uno de mis ebooks gratis en mi web www.investigacionymisterio.com
Ok, pues seguiremos de cerca tus trabajos, Samuel. Muchas gracias de nuevo, y mucha suerte en tus proyectos.
Gracias a vosotros.
Hola amigos!! Os traigo mi #ebook #gratis "El planeta #Nibiru existe". Aquí http://www.amazon.es/dp/B00S33XKLM SÓLO 7 y 8 de mayo. Espero que os guste y me regaleis una reseñita en amazon ;) GRACIAS!!
ResponderEliminar